martes, 8 de abril de 2008

Un día cualquiera, que no es cualquier día, sino...

...hoy mismo.

Hoy tocó despertarse a las 6:30, justo media hora antes de que sonara el despertador... No está mal para lo que suelo dormir últimamente, pero es claramente escaso para lo que estoy acostumbrado. Tras mis rituales abluciones y preparación para irme a trabajar toca mirar por la ventana y ver que nos depara el día.

Primera sorpresa: no es de día, vamos, lo será, pero está el cielo completamente cubierto y no asoma un rayo de luz.

Toca decidir que vehículo pillo para desplazarme. Hoy la solución era relativamente sencilla: el coche de mi padre está en reserva, así que pillaré el mío que, además, tiene las ruedas en mejor estado y el ABS. Cosas que tienen su importancia cuando el día se anuncia y es anunciado como lluvioso. Además, seguro que se me limpia con la lluvia, que falta le hace. No es que sea roñoso... es que soy solidario en tiempos de sequía. jiji

Cuando llego al garaje a sacar el coche hace un ventarrón tela curioso. El tejado de uralita está traqueteando lo suyo, y las puertas golpean en los encajes. Saco el coche y lo paro para cerrar la puerta del garaje. Abro la puerta del coche para salir y... se mueve! Con el cuajo mañanero se me ha olvidado poner el freno de mano y el viento se lleva el coche. Empezamos bien el día!!

Por ahora solo chispea ligeramente mientras voy por el Campo del Sur y decido cambiar el CD del coche. Con eso de que el CD del coche de mi padre está estropeado desde hace 3 años solo puedo escoger la música que quiero escuchar cuando voy con mi coche, pero siempre me olvido de cambiar el CD insertado cuando pillo el coche, así que llevaba ni se sabe cuanto con el CD de Bruce Springsteen dentro.

Al poco de cambiarlo me cae un chaparrón en un instante. Vaya, no es un chaparrón, una ola ha saltado la muralla y me ha caído en lo alto! La primera remojada del coche hoy, y es de agua salada.

A la altura del Drago empieza a jarrear en condiciones. Ya no es una ola. Hasta aquí no llegan (el día que lo hagan comenzaré a creer en la subida del nivel del mar). Y justamente empieza a sonar por los altavoces del coche los primeros compases de Summer of '69, de Brian Adams. Esto se merece un homenaje. El volumen pasa del 9 al 16, y la mente de abril de 2008 a diciembre de 2006. Salta de Cádiz a Cazorla. Esta canción sonaba cuando íbamos a cruzar el Puerto de Las Palomas en Cazorla. Salíamos de una gasolinera y fue empezar a escuchar la canción y empezar a nevar... Yo ya ni recordaba cuando vi nevar por última vez. Seguramente sería en Burgos, hace ya tantos años...

Y los tres, E., J. y yo empezamos a cantar...




Os dejo algunas imágenes de aquel momento.









Post Data: Cuando volvía hoy del trabajo por el Campo del Sur dos niños jugaban a que la ola que salta la muralla los bañase, ¿están majaretas o son los únicos que están disfrutando este día de perros?

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