Más que una sensación

Habitualmente las canciones me transportan a un estado de ánimo en concreto, dándote sensaciones. Elevándote si estás hundido, o relajándote si es el estrés el que te domina. Tengo una gran botica de canciones para administrarme mi medicina musical. Como en toda ingesta, las hay que prefieres más y otras menos. Desde hace años tengo una medicina en forma de partitura musical a la que recurro para elevar mi ánimo, o para mantenerlo alto si ya está ahí. De esto os pueden hablar los sufridos altavoces de prácticamente todos los coches que han pasado por mis manos. Da igual la posología con la que se ha aplicado la medicina: cinta de cassette, radio o CD, el resultado es el mismo: girar el dial de volumen del autorradio, apretar frenéticamente el botón del + en el mando del volante en mi actual vehículo... el objetivo es subir el volumen! que los altavoces crepiten, que las puertas tiemblen, que los cristales del coche sigan el ritmo... mientras yo pego botes tras el volante. No es muy edificante la imagen, lo reconozco, pero la música me posee y provoca inundaciones de endorfinas en mi sistema nervioso.

Para conseguir eso, la música tiene que transmitir más que un simple sentimiento... More than a feeling!!! (de los laboratorios Boston)




Nota: adminístrese con el volumen de los altavoces elevado y con ánimo de disfrutar. Contraindicada en casos de corazón helado o falta de él